De todas las
autobiografías del grupo podemos recoger lo siguientes aspectos que hemos
encontrado en común en todas ellas.
Algunos de nosotros
empezamos nuestra educación en una guardería, de la cual una de nosotros tiene
algunos recuerdos desagradables, ya que la maestra cogía del cuello y hacia
daño a todos los niños y niñas de la clase. Quitando este suceso tan
A la edad de los 3 ó 4
años empezamos nuestra etapa de educación infantil o parvulito, que para
algunos era nuestro primer contacto escolar. Lo que más recordamos son las
canciones infantiles, los bailes, los juegos en el recreo, las clases llenas de
colores y dibujos pegados en las paredes, las actividades que hacíamos en las
clases como el punzón, la pintura con los dedos, la plastilina. Todos
coincidimos en que éramos etiquetados o identificados con una pegatina, uno era
un gatito, una casita, un avión, un árbol, un circulo o un triángulo verde.
Esta pegatina aparecía colocada en el lugar donde teníamos que sentarnos, donde
teníamos que colocar nuestra mochila o nuestras chaquetas, en la caja de
materiales, etc.
En la etapa de
educación primaria, el cambio más grande que se dio fue el contacto con más de
un profesor y las relacionas mantenidas con ellos. La organización de la clase
era distinta, a algunos nos colocaban en forma de U, en fila de uno si nos
portábamos mal, en filas de seis o siete alumnos o, simplemente, de dos en dos.
Aparecieron nuevas materias como conocimiento del medio, matemáticas, lengua,
etc, surgiendo más nivel de dificultad, porque ya había que estudiar. Aquí
surgieron los contactos más personales, pues ya íbamos haciendo grupos de
amigos.